El tratamiento con plasma rico en plaquetas (PRP) se ha convertido en una opción muy recomendada para quienes buscan frenar la caída del cabello y fortalecer el folículo de forma natural. Pero, ¿sabías que el verano puede ser un momento ideal para empezar tus sesiones?
En este artículo te contamos por qué hacerte PRP en esta época del año puede ser una gran decisión, y qué beneficios puedes esperar si estás valorando mejorar la salud de tu cabello.
¿Por qué iniciar PRP en verano?
Aunque muchas personas asocian el verano con más caída capilar (efluvio estacional), es precisamente por eso que comenzar el tratamiento en estos meses puede ayudarte a prevenir una pérdida más marcada y preparar el cabello para el otoño, cuando esta caída suele intensificarse.
Ventajas específicas del verano:
- Cuero cabelludo más oxigenado (por mayor actividad al aire libre), lo que puede favorecer la respuesta al tratamiento.
- El sol (con protección adecuada) también estimula la síntesis de vitamina D, esencial para la salud capilar.
¿Qué es exactamente el PRP capilar?
El PRP (plasma rico en plaquetas) es un tratamiento autólogo, es decir, que se realiza a partir de tu propia sangre. Se extrae una pequeña cantidad, se procesa en una centrífuga para separar el plasma con mayor concentración de plaquetas, y se aplica mediante microinyecciones en el cuero cabelludo.
Este plasma es rico en factores de crecimiento que estimulan:
- La regeneración del folículo piloso
- La formación de nuevos vasos sanguíneos
- La activación de células madre en la raíz del cabello
¿Cuáles son los beneficios reales del PRP?
- Reduce la caída capilar
- Mejora el grosor y la calidad del cabello
- Favorece la regeneración tras injertos capilares
- No tiene riesgos de rechazo (es tu propia sangre)
- Es un procedimiento rápido, seguro y con recuperación inmediata
No es un tratamiento milagroso, pero sí una gran herramienta complementaria en fases iniciales de alopecia o para reforzar resultados tras un injerto.
¿Cada cuánto se recomienda?
El protocolo habitual es de 3 a 4 sesiones separadas por 30 días, con mantenimientos cada 4-6 meses. Por eso, empezar en verano te permite completar el primer ciclo antes de otoño, cuando el cabello suele necesitar más soporte.
Te ayudamos a valorar si el PRP es para ti
En nuestra clínica, te asesoramos de forma personalizada para definir si este tratamiento es adecuado para tu tipo de alopecia, ritmo de caída y objetivos.
Nuestro enfoque siempre es médico y honesto, sin promesas exageradas.
¿Te gustaría saber si el PRP puede ayudarte? Pide una primera consulta informativa y resolveremos todas tus dudas.
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